Mariola Orellana rememora la trágica pérdida de sus cuatro hermanos por adicción a las drogas.
06/12/2024

Con una sinceridad conmovedora, Mariola Orellana ha abierto su corazón al hablar de uno de los momentos más difíciles de su vida: la pérdida de cuatro de sus hermanos a causa de las drogas. A pesar de haber experimentado una tragedia tan profunda, en la actualidad lleva una vida más estable y feliz al lado de su marido, el cantante Antonio Carmona, y su familia, compuesta por hijos y nietos. Sin embargo, su trayectoria no ha estado exenta de problemas, y ha compartido su historia en el pódcast Charlas Adictivas de Ruy Arroyo, donde se trata el tema de las adicciones y la importancia de superarlas con apoyo profesional. Su relato, lleno de dolor y emoción, tiene como objetivo ayudar a quienes enfrentan situaciones similares a las que ella vivió en el pasado.
La tragedia se cierne sobre su historia con la pérdida de cuatro hermanos, una cuñada y numerosos amigos, en una época en la que, como ella recuerda, la sociedad se lanzaba a experimentar con todo tipo de drogas. “Las drogas devastaron mi generación, especialmente entre aquellos con capacidad económica en Sevilla”, relata la productora musical, quien vio cómo muchos de sus amigos se hundían en ese abismo: “Mis amigos, provenientes de familias acomodadas, comenzaron a caer en la adicción. Era algo peligroso, pero que se percibía como divertido...". Aunque reconoce haber tenido contacto con algunas sustancias, incluso llegando a probar la heroína, sabe que tuvo la suerte de poder detenerse a tiempo: “Supe que no quería más de eso en mi vida. Un ángel me protegió, porque bien podría haber perdido la vida como ellos".
El recuerdo de sus hermanos, siempre vivo
A pesar de que han pasado muchos años, Mariola siente una profunda emoción al recordar a sus hermanos, a quienes guarda con afecto y nostalgia: "Mis hermanos eran mis héroes, guapos y talentosos, excelentes estudiantes y deportistas... Imagínate el dolor de mis padres al tener que enterrar a cuatro de sus hijos. Éramos una familia modelo. Desde una familia adinerada en Sevilla, donde su madre ocupaba un alto cargo en la Universidad, la pérdida de cuatro de sus diez hijos por las drogas fue un auténtico golpe. Dos de ellos murieron por adicciones y los otros dos por complicaciones relacionadas. "Se inyectaron con una amiga que tenía VIH y se contagiaron”, detalla Orellana, quien al mismo tiempo entró en contacto con el mundo del sida. Aunque intentó rescatar a sus hermanos, su esfuerzo fue en vano: "Siendo enfermera, sentí la necesidad de sacarlos de ese abismo. Hice todo lo posible por ayudar a mi hermano a superar sus adicciones, pero solo el que desea salir puede salvarse". Desafortunadamente, sus hermanos no pudieron lograrlo. Ella, en cambio, tuvo la fortaleza de decir "no" a tiempo, y por ello se considera una "sobreviviente".
Recuerdos de Antonio Flores
Durante su intervención en el pódcast, Mariola Orellana no dudó en recordar a su querido amigo Antonio Flores, a quien consideraba como un hermano y representante en un momento crucial de su vida. La vida del hijo de Lola Flores, también estuvo marcada por la lucha contra las adicciones. Mariola recuerda el día de su fallecimiento, cuando todo parecía estar en su lugar: “Antonio Flores significaba mucho para mí como artista. Estuve con él el día que falleció. Su adicción estaba bastante controlada. Fue una confluencia de factores, no fue una sobredosis. Se encontraba en un buen momento, aunque tuvo problemas para dormir”. La pérdida de Antonio fue un duro golpe para todos, y como ella misma subraya, “es un reflejo de lo que sufrió nuestra generación, una muestra de la devastación que provocó en muchos. Se llevó a individuos excepcionales y sensibles... porque te transportaba a un mundo que no podías dominar”.
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