Nuevo abrigo y chal de flecos con diadema marcan tendencia en la moda de otoño.

Esta mañana, en Copenhague, se ha celebrado la recepción del presidente egipcio, un acto que ha contado con la presencia de la reina Mary de Dinamarca y el príncipe Federico. Este evento se produce poco después de que se comentara sobre la elección de moda de Kate Middleton para recibir al emir de Catar en Londres. Dicha visita estatal dejó claro que es totalmente factible hacer frente a las inclemencias del frío invierno sin renunciar al glamour y la elegancia. Mientras que la princesa de Gales recientemente optó por dos conjuntos en tonalidades burdeos, la reina Mary ha decidido combinar otros dos colores muy de moda esta temporada.

En esta ocasión, Mary ha elegido un sofisticado conjunto que combina el elegante verde botella con un discreto gris, dos colores que irradian sobriedad y sofisticación, perfectos para un evento formal. A pesar del frío intenso, la esposa del rey Federico ha decidido lucir un abrigo que ya había mostrado anteriormente. Este diseño fue utilizado el año pasado cuando recibió a la reina Letizia y al rey Felipe VI en el aeropuerto, lo que demuestra su capacidad para reciclar piezas clave de su vestuario.

Se trata de un abrigo de corte envolvente con un elegante cuello redondo, mangas largas y un bajo acampanado, el modelo Finchley de la marca londinense The Fold. Esta pieza, que se cierra con un doble botón en la parte del abdomen, está confeccionada con una mezcla de lana que acentúa la figura de quien lo lleva. Debajo del abrigo, Mary ha combinado una blusa blanca adornada con detalles brillantes y una falda larga en tonos grises.

En cuanto a los complementos, la reina ha finalizado su elegante look con una diadema de gran tamaño en gris, un toque femenino que mezcla tradición con modernidad, ideal para quienes busquen un estilo audaz pero clásico. Además, ha optado por unos stilettos en ante a juego, junto con un clutch y unos guantes de piel que complementan a la perfección su atuendo.

Para combatir aún más el frío, Mary se ha envuelto en un chal de lana con flecos que se integra maravillosamente con su abrigo, convirtiéndose en un accesorio esencial para aquellas que deseen lucir elegantes en temperaturas extremas. En cuanto a la joyería, ha optado por un look discreto con pendientes de perlas, un clásico que nunca pasa de moda, además de un delicado broche floral adornado con brillantes.

Este evento resalta no solo el sentido del estilo de la reina Mary, sino también su capacidad para adaptarse a las tendencias de la moda sin perder su esencia. Con su elección de colores y sus complementos cuidadosamente seleccionados, se ha consolidado como una de las figuras más admiradas por su elegancia en el mundo real.

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