La campaña de recolección de castañas prácticamente ha comenzado y la región de Igualeja y el malestar ya es visible entre algunos de sus productores por lo que consideran una bajada injustificada de precios de algunas de las tiendas dedicadas a la compra de este producto. Después de una mala campaña el año pasado, cuando las condiciones climáticas hicieron que gran parte de la cosecha permaneciera en los bosques, los primeros datos de este año tampoco indican una buena temporada de producción.
“Hay muy pocas castañas, pero lo que hay es sano”, defiende uno de los productores que acudió a la manifestación para exigir precios justos por este producto, muy apreciado en determinados mercados y característico de muchos. calles de las principales ciudades donde se venden. asado. “Si es tan malo, ¿por qué lo compran?”, Gritó otro de los asistentes, megáfono en mano, mientras pedía a sus vecinos que se sumaran a la protesta que pasaba por las calles de la ciudad. y también contó con la participación de una caravana de vehículos que se notó tocando la bocina.
Los productores que participaron en la protesta afirman que los precios han bajado drásticamente de 2 euros el kilo de castañas a 1 euro, una cantidad que creen que está fuera de los límites que rentabilizan este cultivo. En este sentido, dicen no entender qué puede justificar un descenso tan pronunciado en este momento, con la temporada en sus primeras etapas y el mayor volumen de castaños aún se encuentra en los bosques de castaños.
“La mejor protesta que pudimos haber hecho fue dejarla en el campo”, dijo otro productor, que dijo que no entendía por qué la castaña tiene un precio tan bajo en este momento de la campaña. Después de la primera protesta, los productores que salieron a las calles ayer dicen que están preparados para mantener las protestas en el tiempo en un intento de revertir la baja.