El Ayuntamiento de Torremolinos ha puesto en marcha una campaña dirigida a la comunidad educativa para dar a conocer los beneficios de la Zona de Bajas Emisiones de la ciudad a través de talleres y juegos. Los destinatarios son los alumnos de tercer grado de Primaria, quienes participarán en actividades impartidas por monitores especializados en Educación Ambiental durante los meses de abril y mayo en los centros públicos y concertados que se han sumado a la iniciativa.
La implantación de la Zona de Bajas Emisiones es una medida obligatoria para todas las ciudades con más de 50.000 habitantes, según lo establecido por la Unión Europea. El objetivo de esta medida es reducir la circulación de vehículos contaminantes, disminuir el tráfico rodado, mejorar la sostenibilidad ambiental y energética, fomentar el uso del transporte público y promover la movilidad peatonal, en bicicleta y sostenible.
En línea con esta estrategia, el Ayuntamiento de Torremolinos está trabajando en la concienciación ciudadana a través de diferentes acciones, como la instalación de paneles informativos. Estas iniciativas forman parte de un proyecto financiado dentro del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia, con el apoyo de fondos Next Generation de la Unión Europea.
Con estas actividades dirigidas a los más jóvenes, se busca educar y concienciar sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y reducir la contaminación en la ciudad. A través de juegos y talleres, se pretende involucrar a los estudiantes en la promoción de hábitos sostenibles y respetuosos con el entorno.
La participación de los centros educativos en esta campaña demuestra el compromiso de la comunidad escolar de Torremolinos con la protección del medio ambiente y la mejora de la calidad de vida en la ciudad. La formación impartida por los monitores especializados permitirá a los alumnos conocer de primera mano los beneficios de la Zona de Bajas Emisiones y su impacto positivo en el entorno urbano.
En resumen, la campaña educativa del Ayuntamiento de Torremolinos busca sensibilizar a la comunidad escolar sobre la importancia de la Zona de Bajas Emisiones y promover prácticas sostenibles para construir un entorno más saludable y respetuoso con el medio ambiente.