La Junta de Andalucía ha retomado el interés en regular el río Grande, un proyecto que ha generado diversas opiniones a lo largo de los años. Durante el Foro ‘Málaga, cómo plantar cara a la sequía’, el director general de Infraestructuras del Agua anunció la realización de un estudio de alternativas para aumentar la capacidad de embalse y regular los ríos. Esta propuesta ha encontrado apoyo en diferentes sectores, como la concejala de Sostenibilidad del Ayuntamiento de Málaga, Penélope Gómez, que abogó por una gran presa de 50 hm3.
El río Grande, que nace en la Sierra de las Nieves y desemboca en el Guadalhorce, ha sido objeto de debate durante años. Actualmente, solo se aprovecha una pequeña parte de su caudal debido al azud de Aljaima, que no tiene capacidad de almacenamiento. Durante los períodos de sequía, se ha perdido una cantidad significativa de agua que podría haber sido aprovechada.
El proyecto de construir un pantano en los términos de Guaro y Coín ha generado controversia en el pasado, con oposición política y de diferentes colectivos agrícolas y ecologistas. Algunas propuestas, como la del alcalde de Cártama, sugieren la construcción de varios pequeños azudes a lo largo del cauce del río para acumular agua en diferentes puntos y mantener el ecosistema natural.
Las opiniones sobre este proyecto son diversas, con posturas encontradas incluso dentro del mismo partido político. Ecologistas como Marisa Casal se oponen firmemente a la construcción de cualquier presa o azud, argumentando que afectaría negativamente a la biodiversidad y el ecosistema del río.
En este sentido, distintas voces han expresado su preocupación por el impacto ambiental que podría tener la regulación del río Grande. Mientras algunos defienden la necesidad de una actuación técnica basada en estudios científicos, otros advierten sobre los peligros de intervenir en un río vital para la ecología de la región. Diferentes actores políticos y grupos ecologistas continúan debatiendo sobre el futuro del proyecto, mientras se espera la realización del estudio de alternativas para regular el agua en la zona.