El embalse de Marbella está alcanzando el final de la temporada de escorrentías, con un total de 43,11 hectómetros cúbicos almacenados hasta la noche de ayer. Esto significa que el nivel del embalse empezará a descender en los próximos días.
Las escorrentías son el agua de lluvia que corre por la tierra y se acumula en ríos, arroyos y embalses. Durante la temporada de lluvias, el embalse de Marbella se llena de agua, ya que recibe un gran volumen de escorrentías. Sin embargo, una vez que la temporada de lluvias llega a su fin, el nivel del embalse comienza a descender gradualmente.
Con 43,11 hm3 almacenados, el embalse de Marbella cuenta con una cantidad considerable de agua, lo que garantiza el suministro para consumo humano, agrícola e industrial en la región. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el nivel del embalse no permanecerá constante, sino que comenzará a bajar a medida que se reduzca el flujo de escorrentías.
La gestión del embalse de Marbella es fundamental para garantizar un suministro sostenible de agua en la región. Durante la temporada de lluvias, se debe optimizar la captación y almacenamiento de agua para hacer frente a períodos de sequía. Además, es necesario implementar medidas de conservación del agua y fomentar el uso responsable de este recurso.
A medida que el nivel del embalse de Marbella comience a descender, es importante que la población tome conciencia de la importancia de utilizar el agua de manera eficiente. Pequeños cambios en nuestros hábitos diarios, como arreglar fugas en grifos, utilizar sistemas de riego eficientes y reducir el tiempo de ducha, pueden contribuir significativamente a la conservación del agua.
En resumen, el embalse de Marbella está llegando al final de la temporada de escorrentías, con 43,11 hm3 almacenados. A medida que el nivel del embalse comience a descender, es fundamental adoptar medidas de gestión sostenible del agua y fomentar el uso responsable de este recurso. Juntos, podemos contribuir a preservar el agua para las generaciones futuras.