El ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, junto con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo Batlle, han anunciado una medida que consideran crucial: la redistribución obligatoria de los niños no acompañados que lleguen a las regiones que se encuentran saturadas.
Esta medida responde a la necesidad de aliviar la presión que enfrentan las regiones más afectadas por la llegada masiva de menores no acompañados, como es el caso de Canarias. La sobrecarga que esto supone para los servicios sociales y las instituciones locales hace imprescindible una redistribución equitativa de estos menores en todo el territorio.
Según el ministro Torres, esta medida es necesaria para garantizar el bienestar de los niños no acompañados y para aliviar la carga de las regiones más saturadas. La redistribución de estos menores permitirá una mejor atención y seguimiento de cada caso, evitando la sobrecarga de ciertas comunidades autónomas.
Por su parte, el presidente Clavijo Batlle ha destacado la importancia de que todas las regiones colaboren en esta medida, asumiendo su responsabilidad y comprometiéndose con la protección de estos menores. La solidaridad y la colaboración entre las diferentes comunidades autónomas son fundamentales para garantizar el bienestar de los menores no acompañados que llegan a España en busca de protección y oportunidades.
Esta medida busca también evitar la concentración de menores en determinadas zonas, lo que puede generar problemas de integración y convivencia. La redistribución de estos niños no acompañados contribuirá a una distribución más equitativa de la carga social y económica que supone su atención, permitiendo una mejor coordinación de los recursos disponibles en todo el territorio.
En definitiva, la redistribución obligatoria de los niños no acompañados que lleguen a las regiones saturadas es una medida necesaria y urgente para garantizar su bienestar y para aliviar la presión que enfrentan ciertas comunidades autónomas. La colaboración y la solidaridad entre todas las regiones son clave para lograr una atención adecuada y una integración exitosa de estos menores en la sociedad española.