Este Jueves Santo en Málaga, a pesar de las condiciones climáticas desfavorables, ha sido testigo de un evento especial donde miles de personas se aglomeraron en los muelles del puerto y las calles del Centro para presenciar el desembarco de La Legión y su desfile hacia la parroquia de Santo Domingo, donde se lleva a cabo el traslado del Cristo de la Buena Muerte de la Congregación de Mena.
La Reina Doña Sofía, acompañada de su hermana la princesa Irene de Grecia y Dinamarca, asistió al desembarco de la compañía de honores del Tercio Don Juan de Austria III de La Legión a las diez de la mañana. A pesar de la lluvia y el viento, la Reina se mantuvo atenta durante la maniobra del desembarco y pasó revista a la tropa antes de que comenzara el desfile por el Centro de Málaga.
Durante el recorrido, que se acortó debido a las condiciones climáticas, numerosas personas se tomaron fotografías con los legionarios en los momentos de descanso. El desfile se llevó a cabo por el eje de la Alameda Principal, y a lo largo del evento, Doña Sofía se mantuvo bajo un paraguas debido a las fuertes ráfagas de viento.
Una vez finalizado el desembarco, la Reina se trasladó a la explanada de Santo Domingo en un coche oficial. A pesar de las dificultades climáticas, el evento se desarrolló con éxito y la presencia de la Reina Doña Sofía resaltó la importancia y el significado de este acto en la Semana Santa malagueña.