El fervor que Málaga siente por La Legión y el Cristo de la Buena Muerte ha quedado una vez más en evidencia en la mañana de este Jueves Santo, a pesar de la lluvia que no impidió que miles de personas se congregaran en las calles de la ciudad para presenciar el desembarco de los caballeros y damas legionarias en el Puerto y su recorrido hasta la iglesia de Santo Domingo para participar en el traslado del Cristo de Mena en la Semana Santa de Málaga. Estos eventos contaron con la presencia de la Reina Sofía, quien presidió por primera vez estos actos.
En el puerto de Málaga, el buque ‘Contramaestre Casado’ de la Armada Española atracó, y de él desembarcó la compañía de honores del Tercio ‘Don Juan de Austria’ III de La Legión. Tras formar ante las autoridades presentes, incluido el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, las tropas abandonaron el recinto portuario desfilando.
La Reina Sofía llegó a la explanada de Santo Domingo junto a la infanta Irene, donde fueron recibidas por autoridades locales y religiosas. Posteriormente, visitaron la capilla donde se les impuso la medalla de la cofradía. Durante el traslado, numerosas personalidades destacadas estuvieron presentes.
El público se agolpó en las calles para presenciar el paso de los legionarios, demostrando su cariño con aplausos. En la plaza de Fray Alonso de Santo Tomás, se realizó el relevo en la custodia del estandarte del Cristo de la Buena Muerte y Ánimas entre los tercios de La Legión.
Una vez concluido el relevo, la imagen del Cristo de la Buena Muerte y Ánimas salió de la iglesia de Santo Domingo a hombros de los legionarios, mientras se escuchaban himnos y marchas procesionales. Tras un emotivo homenaje a los caídos, la imagen fue entronizada en la casa hermandad, culminando así una intensa mañana de celebración y tradición entre Málaga y La Legión.